
Es muy probable que tengas sentimientos encontrados si estás embarazada y todavía te queda un tiempo por estudiar. Lo primero que debes tener claro es que tu vida está a punto de cambiar, pero eso no se traduce necesariamente en que debas abandonar tu periodo académico. Por el contrario, deberás organizarte mejor y pensar que un título será un beneficio para tu futuro y para el del bebé.
Por eso, hemos organizado una serie de recomendaciones que te ayudarán a sobrellevar con éxito esta combinación de etapas de vida:
- Descanso reparador: si estás embarazada debes dormir una cantidad suficiente de horas, por lo que es aconsejable organizar mejor tus tiempos de estudio. Ten en cuenta que no es recomendable pasarte largas noches sin dormir, ni mucho menos ingerir café para mantenerte despierta. También evita estudiar en ambientes donde tus compañeros estén fumando.
- Logística anticipada: desde unos meses antes que nazca el bebé, asegúrate de contar con las personas de tu entorno que puedan ayudarte a cuidarlo mientras tú estás en clases o estudiando. Convérsalo con tu pareja, familiares o amigos. Si estás estudiando en el extranjero debes poner especial atención a esta recomendación y coordinar si debes volver a tu país o alguien viajará para apoyarte.
- Madurez como bandera: es una realidad que muchas mujeres logran combinar con éxito su maternidad con obligaciones laborales y académicas. Por eso ten la convicción de que tú también puedes hacerlo, porque el embarazo no es una enfermedad. Claro está que esto no significa que debes embarazarte durante la etapa universitaria o en la adolescencia, pues esta es una decisión que debe estar relacionada con la madurez y con el hecho de asumir la gran responsabilidad que se avecinará.
Para tomar en cuenta por etapas:
- Primer trimestre
Aparece la “hipersomnia” y la mujer siente que necesita dormir mucho más de lo normal. Esto podría afectar tu concentración en clases o al momento de estudiar.
Segundo trimestre
Es el lapso de formación de la placenta, la mujer se conecta nuevamente con el mundo exterior. Ya está adaptada al embarazo. Aprovecha estas semanas para ponerte al día o adelantar la mayor cantidad de trabajos o labores que tengas.
Tercer trimestre
Una buena preparación física y psicológica para la maternidad te ayudará a tener el mejor parto posible, a prevenir la depresión postparto. El tamaño de tu vientre podrá ser un obstáculo para llevar una vida estudiantil complemente normal, pero ya para este momento estarás habituada a tu condición y seguramente tendrás un plan que te ayudará a culminar tu embarazo con éxito mientras estudias.