Puede que sea difícil de creer que, con las nuevas tecnologías, competencias y un entorno tan agitado, existen carreras que, si bien son parte del pasado, no pasan con el tiempo: la Arqueología es una de ellas.
De niños, muchos sueñan con ponerse un sombrero marrón, un pantalón corto de color extraño, una camisa cualquiera y unas botas de montaña e irse a excavar los suelos cercanos a casa con el objetivo de encontrar los restos de un enorme tiranosaurio rex.
De grandes, esas fantasías toman un giro más real. Unos se encaminan hacia profesiones más comunes, mientras que otros entran al mundo de la Arqueología, ese mundo que, cuando pequeños, conocían gracias al mundo del cine y el cliché de una persona arrodillada en tierra rojiza buscando huesitos de la Prehistoria. Sin embargo, de adultos y universitarios, han descubierto que es muchísimo más que investigar la vida de los dinosaurios.
Sus orígenes surgen de la historia básicamente, por esta razón es que está tan ligada a la carrera. Brinda la posibilidad de tener una visión profesión única y completa, que prepara al estudiante en diversas materias metodológicas, estadísticas, geología, cultural…. Lo que le da la capacidad de indagar con certeza a la hora de trabajar.
En muchas universidades la Arqueología puede encontrarse como un título de grado de Ciencias Sociales, mientras que, en otras entidades educativas, puede ser alguna orientación o especialización que decidas dentro de otra carrera, como por ejemplo, la Antropología.
En un principio, la Arqueología se definió en algo similar a “estudio sistemático de los restos materiales de la vida humana que ya ha desaparecido”. Con el paso del tiempo, esa definición ha evolucionado. Hoy, la Real Academia Española de la Lengua la define como la “ciencia que estudia lo que se refiere a las artes, a los monumentos y a los objetos de la antigüedad, especialmente a través de sus restos.”
En otras palabras, es una disciplina que estudia las sociedades y los cambios que ésta presenta por medio de restos materiales distribuidos en el espacio y contenidos en el tiempo. Profesión dentro de las ciencias sociales, es una de las carrera con más demanda y mayor competividad.
La arqueología como profesión
La arqueología es muy fascinante, aunque se debe admitir que el trabajo es muy lento, minucioso y exigente. Las tareas de un arqueólogo son muchas. La primordial es acercar el pasado al presente. Por tal motivo, muchos arqueólogos se centran en el trabajo de la excavación. Un arqueólogo, también, puede ser la persona que conserva y restaura los objetos encontrados en las excavaciones. Finalmente, está el arqueólogo que se especializa en la ardua tarea de investigar, documentar y difundir el patrimonio arqueológico.
Hay arqueólogos que trabajan bajo el auspicio de grandes instituciones de investigación, como universidades o museos. No obstante, muchos de estos arqueólogos también son profesores de universidad.
Algunas ramas de la Arqueología
- Arqueología subacuática – recuperación, investigación y estudio de artefactos o edificios sumergidos en el océano
- Arqueología industrial – investigación del periodo industrial y los residuos urbanos
- Asiriología – estudio de la civilización de los asirios
- Egiptología – estudio de Egipto Antiguo
Universidades en los Estados Unidos